Antes del Derrumbe #24 Redes Sociales, Tiempo y Aceleración 2z3n3e

Todo se está derrumbando y qué hacemos nosotros me contaste antes del derrumbe porque todavía podemos levantar cosas para que se caigan después muy buenas a todos hoy todavía quedan cosas en pie así que podemos comenzar con nuestro vigésimo cuarto programa de antes del derrumbe yo soy alejandro pérez polo y hoy y hoy vuelvo a estar con oscar cuartango y con mariano pinós tras un poco el la excepción de la del último programa que tal vais hoy muy bien buenas tardes queridos amigos pues nada me alegro que estéis bien algún día de hecho tendremos que hacer un programa los cuatro con alex recht porque yo creo que lo dos queréis también hablar de cultura o extender algunas reflexiones que hayamos hecho en el anterior programa pero bueno en todo caso hoy tenemos que tratar un tema pues también muy especial un tema que de alguna manera siempre hemos tratado en varios programas ya de de del podcast aunque desde de otros ángulos porque hicimos aquel programa del pp que fue programada número cuatro hicimos el programa de del posthumanismo con david souto el filósofo y hoy queríamos un poco pues entrar no un tema que desde que está en agenda pública tras la prohibición de los móviles y los smartphones en los institutos y que de alguna manera siempre es incómodo porque en el fondo los tres que estamos aquí pues somos s de redes sociales aunque sea en algunos más otros menos pero hay un hay un tema con él la digitalización y la virtualización de nuestras vidas que siempre genera pues esa cierta incomodidad porque al ser s la gente le cuesta más problematizar lo pero el tema es que de alguna manera tuvo que es las redes sociales la forma de relacionarnos a través de ellas los efectos sociales que tienen pues aunque cueste de hacerle qué hacer de alguna manera un un análisis crítico profundo que de alguna manera pues tenga tenga tenga también una una repercusión tanto en la política como en como en la cultura y bueno este programa lo queremos dividir lo quiero dividir en dos apartados el que sería el puramente social y cultural del efecto de las redes sociales en esta forma de relacionarnos de socializar y por otro lado pues las consecuencias políticas que justamente tienen las redes sociales hoy en nuestra forma de construir lo político de construir identidades políticas y demás así que ahora antes de nada de entrar pero empezaremos con el tema cultural pues quería situar una cosa muy simple facebook se popularizó en en españa en los años dos mil siete dos mil ocho es decir que han pasado ya dieciseis años y parece que cada vez hay más aislamiento digital o más desconexión entre la gente por eso mismo aunque aquí y condiciona un poco la pregunta la pregunta que os quiere lanzar a los dos sí nuestra sociedad está hoy mejor más conectada y es mejor que gracias a las redes con estos dieciseis años de experiencia que ya tenemos en marcha pues mira yo por un lado tengo muchas ganas de hablar de ese tema pero por otro tengo que confesar que me da también algo de pereza decir lo que pie nso de verdad sobre este tema porque cualquier aproximación crítica a este tema implica un reflejo automático mucha gente que rauda a llamarte ludita o nostálgico o cascarrabias viejo cascarrabias abuelo cebolleta con una sonrisita irónica y tal pero yo creo que no no estamos mejor como sociedad después de que las tic han arrollado nuestras vidas en estos dieciseis años estaríamos mejor sin ellas bueno no sé lo que sí sé es que mejor no estamos tengo serias dudas de si los posibles beneficios compensan los nuevos problemas que se han generado por ejemplo hay un concepto en teoría de la comunicación que sea el cypher el mediador entre los públicos y las instituciones no que venía ser envidiado tradicional por los medios de comunicación de masas que durante el siglo veinte pues mantuvieron el debate público dentro de unos parámetros ideológicos pues moderados eran aquellos tiempos en que las partidas electorales se decidían en el centro pero internet y las redes sociales se cargaron la mediación son gracias a eso a ver pudimos vivir aquella circulación de ideas de radicalidad democrática que en dos mil once posibilitaron el m y toda la ola de