
Descripción de 43. Los reyes también se mueren 1m6s1z
Hoy vamos a charlar sobre la música que acompañó a las muertes regias. Obras para tiempos luctuosos que fueron testigos de los grandes giros en la historia de España a causa de la llegada de las parcas. Música de Jerónimo de la Torre, Morales, Enzina, Nebra, Gombert o José de Torres, nos servirán como ejemplos para hablar de estas perdidas monárquicas y de cómo se estructuraba el oficio de difuntos a lo largo de los siglos. 614y
Este contenido se genera a partir de la locución del audio por lo que puede contener errores.
Triste España sin ventura, todos te deben llorar, despoblada de alegría para nunca en ti tornar.
Hola a todos y a todas, queridos escuchas almor hispano, bienvenidos a un nuevo viaje a través de la música española del pasado. Música que se nos muestra cercana, casi de rabiosa actualidad y que, con su escucha, nos hace volar la imaginación hacia otro tiempo y espacio. Soy José Dulce Chenoy y la maquinaria de este música antiguo amor hispano ya se ha puesto en marcha.
Abrocharos los cinturones que despegamos en 3, 2, 1… Amigos y amigas, cómo estáis? Espero que bien, que súper bien y yo que me alegraré de ello. Qué contento estoy de volver a saludaros a través de este canal que tanto nos gusta y que ya se ha convertido en uno de esos programas de cabecera para muchos músicos y melómanos. De hecho, ya me ha pasado en alguna ocasión que, al realizar una llamada telefónica, mi interlocutor me suelta la voz del podcast.
La verdad que es una anécdota que me hace muy feliz porque demuestra que estos repertorios cada vez es de mayor interés y que se va corriendo como la pólvora. Y la verdad es que ya tenía ganas de tener tiempo para sentarme a desarrollar un nuevo programa, porque todo se ha dicho, parece que os tengo un poco abandonados, pero no es así, es que estoy ya desarrollando el contenido audiovisual que muy pronto podréis disfrutar y si a eso le sumas que han pasado varias entrevistas y he publicado contenido exclusivo para fans, pues bueno, que casi que ya han pasado unos 3 meses desde mi último programa así como con chicha, de esos que estamos vosotros y yo mano a mano. Que por cierto, si os animáis a apoyar este programa con una suscripción y una cosita de nada, podéis disfrutar de contenidos varios dentro de este mundillo hispánico. Y vamos, la cantidad es la que queráis, con un mínimo de un euro y medio.
Bueno, pues lo que cuesta un café, ¿no? ¡Enda va! ¡A suscribirse! Hoy le vamos a meter mano...
¡Ole tú! ¡Ole tú! ¡Ale sí! Que me venía muy facilona la expresión. Vamos a meterle mano al tema de las muertes regias, porque sí, porque muere el rico, porque muere el pobre, muere el rey y muere el papa, que aquí después de morirse nadie se escapa.
¡Hay que ver menudo lío! Y es que por eso he empezado con una versión para tecla del famoso Tris de España sin Ventura de Juan de Lencina, interpretado al órgano por Carlos García Bernal, excelente músico y persona a quien desde aquí le mando un saludo y un fuerte abrazo. Evidentemente, todos hemos de morir, y en mayor o menor medida dejaremos huella en este mundo, o un ligero rastro más reluciente o anodino, pero en el caso de la historia pasada, las muertes regias fueron determinantes para el devenir de los diferentes reinos, marcaron el rumbo de las políticas nacionales y sacudieron la geopolítica mundial. Parece mentira, ¿eh? Una única persona, casi siempre hombre, a pesar de su insignificancia y de lo efímero de su condición, de su destino podía depender el rumbo de la historia.
Por este motivo vamos a detenernos en este Tris de España sin Ventura, un lamento de gran carga poética escrita por Juan de Lencina, un crack que además de músico era un terremoto de las letras, no sólo por lo picantón de algunas de sus obras, como El Cucú o Si habrá en este Valdrés, sino porque introdujo el género pastoril antes incluso que Garcilaso de la Vega.
Juan, príncipe de las Españas, de virtudes y ciencia lleno, verdadero cristiano, muy amado de sus padres y de su patria, en pocos años realizó muchas obras buenas con prudencia y virtud. Descansa en este túmulo mandado a hacer por su óptimo y piadoso padre Fernando, rey invicto y defensor de la Iglesia. Su madre, la Reina.
Comentarios de 43. Los reyes también se mueren 3q4sy