168 - Conan, el bárbaro (1982) 2g3h26

Oh studios presenta todo puede suceder en efecto mortem pesca en mi localidad natal zamora hay una pequeña ermita erigida en plena avenida víctor gallego es característica porque la entrada se puede apreciar una culebra de grandes dimensiones disecada y anclada en la parte superior del techo del r recibidor cuando era pequeño y pasaba por delante siempre me fijaba cuando la puerta estaba abierta para asomarme levemente y alzar la mirada un reptil propio de regiones tropicales amazónicas pero nunca europeas esa enorme bestia me daba pavor no era ninguna invención o quimera perteneciente al folclore popular allí estaba colgada del techo nunca he sabido la procedencia del animal no obstante me acuerdo el día en que pregunté a mi madre cómo llegó ese monstruo a adornar la pequeña ermita zamorana la historia que me contó real o inventada me fascinó resulta que hace muchos años en zamora cuando no existían los vehículos motor y la gente aún utilizaba el sistema de trueque para cosas cotidianas corría un rumor entre los campesinos sus ovejas desaparecían y encontraban restos de huesos en las llanuras cercanas esto ocurría todos los veranos secos e infernales en los que era prácticamente imposible salir a la calle durante las horas del mediodía ese rumor comenzó a tomar forma en las tabernas con los testimonios de varios aldeanos que decían haber visto a una enorme serpiente engullir el ganado entre gemidos agónicos pues las ovejas estaban vivas mientras el monstruo las devoraba estos testimonios eran creídos e ignorados hasta que realmente varios vecinos observaron al reptil deslizarse por una tierra de labranza destacando su cuerpo negro entre los amarillos surcos el animal se arrastraba con lentitud debido a un bulto del tamaño de una persona pequeña que sobresalía de su alargado cuerpo ante esta horrible visión la sangre de los campesinos les paralizó cuando el terror le dio tregua avisaron a las autoridades en cuanto el mito tuvo la consideración de realidad amenazante se desplegó un un operativo para cazar a semejante criatura no hubo éxito el ganado seguía desapareciendo y nadie tenía suficiente valor como para seguir a ese diablo hasta su nido quizá fuese el hecho que puso al gendarme de mayor rango en disposición de proponer a los jueces de gobierno que organizasen una partida capitaneada por presos mayormente condenados a muerte para localizar a la bestia a cambio del indulto tal vez fuese un delirio pero en aquellos tiempos se considero como una propuesta razonable las cárceles estaban demasiado pobladas como para ignorar el hecho de que los presos consumían recursos al estado así que por demencial que nos parezca se aprobó la medida un singular preso a quien el garrote vil la guardaba en pocos días se ofreció voluntario para dar caza al reptil no pidió caballo ni armadura tan solo una espada bien afilada un espejo de cuerpo entero un gran cántaro de leche y que los guardias que le vigilaban mantuviesen con él una distancia tan grande como fuese posible era una muerte segura pero se aceptaron sus condiciones y se le dejó partir con escolta hacia el lugar donde este monstruo había establecido su zona de caza tras varios días los guardias se atendieron a las órdenes del preso manteniendo la máxima distancia visual con el reo observaron como este plantó en las tierras de sembrado el gran espejo en posición vertical a continuación colocó el cántaro de leche y vertió treinta litros en él antes de esconderse tras el espejo allí permaneció varias horas observando a su alrededor bajo un forraje de ramas hojas secas todo hasta que el sol empezó a caer y pudo ver a la criatura acercándose a la leche mientras esta se aproximaba reptando el preso agarró firmemente la empuñadura de la espada el animal se irguió para oler el cántaro de leche y fue entonces cuando vio su propio reflejo en el espejo