“ESTO ES CINE”: Las escenas más ICÓNICAS de películas - BANGARANG 1x12 li14

Bienvenidos a Bangarang, el podcast en el que el cine no solo se ve, se vive.

Estoy con Sara Draven, soy Jorge Vázquez y cuéntanos, Sara, de qué vamos a hablar hoy.

Yo creo que vamos a hablar de un tema muy guay, Jorge.

Vamos a hablar de escenas icónicas del cine.

De cuando vemos una escena y decimos, esto es cine.

Icónic.

Totalmente.

Pues sí, yo creo que hay además muchas escenas del cine que, aunque no hayas visto la película, son reconocidas.

Están en el inconsciente colectivo de todo el mundo y reconocen.

¿Quién no reconoce la escena de psicosis en esa ducha? A lo mejor hay mucha gente que no ha visto la película, pero esa escena la ha visto.

La escena de Titanic con Rose y Jack.

Tenemos muchas escenas en el cine que se quedan grabadas para siempre y vamos a analizar qué tienen esas escenas, cuáles son las escenas que más nos han marcado a nosotros.

No tienen por qué ser escenas, a lo mejor, icónicas, reconocidas por todo el mundo, pero que si a nosotros nos ha dejado huella.

Vamos a hacer ese repasito.

Yo creo que va a estar muy guay.

Así que vamos a ponernos un poquito nostálgicos en este capítulo y vamos a por otro episodio de...

¡Báñanos! Nosotros que nos dedicamos al cine, bueno, no somos directores de cine, pero estamos todos los días charloteando de cine en nuestras redes.

Estamos hartos de ver el comentario de esto es cine y ese cigarrillo ahí.

Entonces, si yo te digo la frase esto es cine, ¿cuál es la primera escena que se te viene a la cabeza? La primera escena que se me viene a la cabeza es Luke, yo soy tu padre.

Me encanta la cara intensiva que pone.

Es que esa escena, por favor, Luke, yo soy tu padre.

O sea, nos quedamos todos en la época de cuando vimos Star Wars por primera vez flipando, Jorge.

¿Quién no se acuerda de esa escena? Aunque no hayas visto, como hemos dicho, al Star Wars, porque hay mucha gente que a lo mejor no le gusta la saga, pero el yo soy tu padre, o sea, eso es increíble.

Lo que has dicho de psicosis, otro igual, el semáforo de los puentes de Madison.

O sea, eso es cine.

Totalmente.

O sea, no sé para ti, ¿cuál es la primera que se te viene a la cabeza? Pues a lo mejor soy un poco sádico, pero lo primero que se me viene a la cabeza es la cara de Jack Nicholson.

O sea, para mí es un ejercicio de interpretación.

Solo es la cara, encima no tiene un ejercicio corporal, ni nada, y esa yo creo que es de las escenas que se queda de la película, yo creo que es de las que en la impronta general se nos ha quedado grabada.

Y a ver, pues la parte romanticona, pues yo estoy viendo a Jack, a Rose, ahí.

Pero yo de verdad, o sea, esa escena, aunque es muy icónica y yo la adoro, me encanta, hay fantasía, al mismo tiempo la detesto, porque basta ya la gente que la intenta imitar, porque es que ves ahí a María José de Alicante con su novio Julian de Cuenca, que se van en las vacaciones a Benidorm, le montan en una de estas barcas que van a dar vueltas por los sitios y se ponen a hacer así el Titanic.

¡Hazme una foto, Mari Carmen, hazme una foto con el Julian! Es que ya no me acuerdo ni cómo se llama esta gente.

Y yo es que esos momentos, yo es que digo, ¿cuánto daño ha hecho Titanic en el mundo? O sea, parad ya de hacer esto, por favor, os lo pido.

Y es que además, hay gente además guapísima, monísima, me acuerdo en el viaje a Santorini que nos llevaron a una chica con un vestidazo, no sé qué, no estáis igual, es que no estáis igual, es que no, estáis igual.

Yo no he visto esa simbiosis, es que no hay música, es que yo creo que esas escenas...

La música es un papel muy importante, la música.

En esas escenas yo creo que se conjugan, o sea, es cine y es magia porque se conjugan los elementos principales del cine, que es la interpretación, la dirección, la parte de producción, o sea, se conjuga todo eso y hace magia.

Entonces, eso no lo tienes tú en ese carricoche en Alicante, en Benidorm, dando una vuelta, que no lo tienes.

Pero tienen que intentarlo, pobrecito.

Es que de verdad, deja vivir su sueño.

Jorge, déjalo vivir su sueño.

Yo, por ejemplo, fui a Londres, de las muchas veces que he ido, y una de las cosas que hice lo primero de ir a Londres fue ir a Notting Hill.

Yo necesitaba ir a esa casa de Notting Hill.

Es lo que también nos pasa, o a mí me pasa.

Cada vez que viajamos a algún sitio, ¿no te pasa que quiero ir a algún sitio donde se haya rodado alguna escena? Literal, sí, siempre.